Changó, es un ORICHA guerrero, el rey de la Religión Yoruba, y uno de los más populares de su panteón.
está en el grupo de los Ochás de cabecera. Oricha de la justicia, la danza, la fuerza viril, los truenos, los rayos y el fuego, dueño de los tambores Batá, Wemileres, Ilú Batá, o Bembés, del baile y la música; representa la necesidad y la alegría de vivir, la intensidad de la vida, la belleza masculina, la pasión, la inteligencia y las riquezas.
Representa el mayor número de situaciones favorables y desfavorables. Fue el primer dueño e intérprete del oráculo de Ifá, es adivino e intérprete del oráculo del Diloggún, del biagüé, y Aditoto.
fue el cuarto Alafín, es decir, rey de Oyó; en la segunda dinastía de Oduduwá, luego de la destrucción de Katonga, la primera capital administrativa del imperio Yoruba.
llegó en un momento trascendental de la historia Yoruba, donde las gentes se habían olvidado de las enseñanzas de olodumare.
se cuenta que fue enviado con su hermano gemelo, para limpiar la sociedad, y que el pueblo siguiera nuevamente una vida limpia y las enseñanzas religiosas que habían perdido.
fue un rey guerrero, ayudó a construir las formaciones de batalla, y gracias a sus conquistas, el imperio Yoruba se extendió desde Mauritania hasta Gabón. Se hizo famoso sobre todo por su caballería de guerra, la cual tuvo un papel fundamental en la construcción del imperio.
fue el primer awó, que luego cambiara el aché de la adivinación con Orula por la danza; por esto es muy importante en el culto de Ifá para los babalaos, los cuales tienen una mano de Ikines llamada "mano de changó".
Es hermano de corazón de Babalú Ayé, y por esa razón come primero cuando se corona este Oricha, ya que fue quien lo ayudó a curar de sus enfermedades.
sus piedras u otanes se recogen de cascadas o ríos. Su símbolo principal es el Oché, que es un muñeco tallado en cedro, y que en vez de cabeza tiene un hacha doble.
fue esposo de Obbá, Oyá y Ochún. En algunos caminos desciende directamente de Oloddumare, y en otros es hijo de Obbatalá y Oduduwá.
otros lo sitúan como hijo de Obbatalá y Aggayú Solá, y también de Obbatalá Ibaíbo, y Yembó, fue criado por Yemayá y Dadá.
Hermano de Dadá, Orúnmila, Oggún, Elegguá, Ochosi y Ósun.
habla en el diloggún, por Obbara (6), y por Ellila Sebora (12), que es su letra principal.
Su receptáculo es una batea de madera, preferentemente de cedro con tapa, que se sitúa arriba de un pilón que muchas veces puede tener forma de castillo.
Sus atributos principales son seis herramientas hechas en cedro; hachas, espadas, rayos, tambores, una mano de caracoles, corona, copa, un sable, maraca de güira, Y una maza.
EN ALGUNAS OCACIONES ESPECIALES lleva un chekeré, hecho de carapachos de tortuga.
Entre los utensilios, propios de guerra, que se le pueden poner alrededor se encuentran un caballo negro, un tambor, una bandera roja brillantes, 3 hachas, un garrote y una cimitarra.
Sus elekes o collares, se confeccionan alternando cuentas rojas y blancas.
se viste con una camisa roja suelta, y pantalones blancos de listas blancas y rojas.
También puede vestir pantalones blancos y cortos, con las patas cortadas en puntas. Su pecho está al descubierto y se le agrega una chaqueta corta, en los mismos colores rojo y blanco.
En su cabeza lleva una corona, que a veces se le da la forma de castillo.
es portador de Un hacha de dos cabezas, Una copa, y Una espada.
Se le ofrenda amalá, hecha a base de harina de maíz, leche y quimbombó, plátanos verdes, otí, plátano indio, vino tinto, maíz tostado, cebada o alpiste.
Se le inmolan, carneros, gallos, codornices, jicotea, es decir tortuga de río, gallina de guinea, palomas, entre otros.
Sus ewés o plantas son: el bledo punzó, atiponlá, platanillo de Cuba, Ceiba, paraíso, cedro, yagruma , álamo, baría, zarzaparrilla, bejuco carey, bejuco colorado, almácigo, camagua, combustera cimarrona, caña de azúcar, cebolla, caoba, flamboyán, guano blanco, guano prieto, laurel, maíz, palo amargo, mamey colorado, palo boma, hierba jicotea, piñón, piñón de botija, quimbombó, rompesaragüey, ruda, tomate, travesera, yaya, palma, peonía, hierba buena, trébol, canistel, filigrama, y yaba.
Cuando baja, golpea con su cabeza y da tres vueltas de carnero hacia los tambores. Abre los ojos desmesuradamente y saca su lengua. Sus movimientos característicos son blandiendo el hacha y agarrándose los testículos. Ningún otro Oricha dará saltos más altos, bailará más violentamente, o hará gestos más extraños.
puede comer fuego. Los bailes de changó suelen ser de guerrero o eróticos. Como guerrero blande su hacha, y hace gestos amenazadores.
Como amante, trata de demostrar el tamaño de sus atributos, se dobla, hace guiños y actúa de forma seductora con las mujeres de la audiencia. Los bailadores, imitarán sus movimientos y su contoneo sexual.
Como parte de la transculturación, y del peligro que vieron los esclavos traídos a Cuba de perder sus raíces, cada santo adoptó el nombre de un santo católico; está el hecho de que los esclavos venían de diferentes partes de África, y en cada uno se le llamaba diferente.
entre los santos católicos se sincretizó con santa bárbara.
en kimbisa.
Nsasi, Gallo Ronco, Jorito de la Loma, Bomasere, Mirito, y
Siete Rayos.
en Mayombe.
Nsasi Dina Motuto, Yoasi, Siete Rayos, Marufina, Bolla, Sobranuensasi, y Nsabuari Munalongo.
para los abacuá.
Okún.
para la Brillumba.
Nrita, Nritan, Kitan, Mukiamamuilo, y Nsasi.
para los Arará.
Hebioso, y Jebioso Anamá.
para la Iyesá.
Arumafeo Alami, Dambalá, y Aladde.
y para los Gangá.
Mamba.
Los hijos de changó son voluntariosos, enérgicos, altivos, inteligentes, y conscientes de su valor.
los hombres toleran las discrepancias con dificultad, y son dados a violentos ataques de cólera.
Pendencieros, mujeriegos, aman el dinero, pero no tanto el trabajo para conseguirlo, machistas y libertinos.
En el caso de las mujeres, son muy charlatanas y hasta a veces mentirosas, son de entrometerse en asuntos de los demás, y no perdonan desde ningún punto de vista las infidelidades. Son trabajadoras y son capaces de llevar hasta las últimas consecuencias sus ideales, aunque ello implique enfrentarse con los demás.
Se saluda ¡Kaó Kabiosilé, Changó Alufina!
y Los caminos de changó, se refieren más bien a los títulos que recibiera cuando fue rey. Es decir, su realeza, su arte de legislar, de hacer la guerra, su fuerza, su relación con el fuego y el rayo, entre otros aspectos.