El susurro del río y el eco del corazón
Dicen que el amor perdido no se olvida… solo se transforma. A veces permanece como herida abierta, otras como un eco persistente que nos llama desde la distancia del alma de alguien que ya no está. ¿Pero qué ocurre cuando ese amor aún vibra dentro de ti con fuerza, cuando los recuerdos se sienten vivos y te preguntas si el destino terminó o solo se detuvo?
En los misterios del amor, Ochún —la orisha de las aguas dulces, la sensualidad, la unión, la dulzura y el deseo— guarda las llaves del retorno sentimental. Ella escucha los clamores silenciosos de quienes aman con intensidad, y desde su río sagrado puede abrir caminos donde antes solo había distancia, orgullo o confusión.
Este ritual es más que una súplica para que alguien regrese. Es un acto espiritual de afirmación, un llamado desde el alma hacia el alma del otro. Pero también es un espejo: te permite ver tu valor, tu intención y tu verdad.
📅 Cuándo realizarlo:
Un viernes o sábado, días consagrados a la oricha y al amor, y En fase de luna creciente o llena.
🕯️ Materiales:
una vela amarilla.
una vela blanca.
un frasco de cristal con tapa.
Miel de abejas pura.
Papel pergamino, o de estrasa, lo importante es que sea marrón.
Bolígrafo o color rojo.
Canela en polvo.
Azúcar morena o prieta.
Foto tuya y de la persona en cuestión.
cinco monedas doradas, previamente lavadas con agua común.
1 girasol o flor amarilla
Agua de canela, (se prepara una infusión dulce de canela con miel, que esté caliente).
Copa con agua y una cucharada de miel dentro sin revolver.
Incienso de miel, canela o sándalo.
y Tu bóveda espiritual activada en modo defensa, (pero es opcional).
✨ Preparación espiritual:
primero.
Baño espiritual previo:
Prepara un baño con pétalos de flores amarillas, canela, miel y colonia de olor dulce, (o Agua de Florida con un chorrito de miel).
realizalo antes del ritual, pidiendo a Oshún que limpie tu energía y te llene de dulzura y atracción.
crea un Altar para ofrendar a la orisha:
Prepara una mesita o espacio limpio con un pañuelo amarillo o dorado.
Coloca allí:
El vaso con agua y miel.
Las flores amarillas.
Las monedas.
El frasco del ritual (que este lo prepararemos a continuación).
Las velas (amarilla y blanca).
El incienso encendido,y Invocamos a Oshún:
Toca suavemente el frasco con tus manos, respira profundo y di:
“¡Iború, Iboya, Iboshishé, Oshún!
Madre del río, reina del amor y la dulzura,
escucha mi llamado desde lo profundo de mi corazón.
Tú que dominas los sentimientos y la atracción,
te pido que endulces el alma de, (y dices el nombre de esa persona),
que su pensamiento me recuerde, que su corazón me busque,
que el amor que un día existió, regrese purificado y verdadero.
Si es mi destino, tráelo de vuelta con firmeza y con paz.
Si no ha de ser, líbrame del dolor y tráeme un amor que me merezca.”
🪄 y esta será la preparación después del Frasco de Retorno:
Escribe en el papel tu nombre completo 5 veces.
Encima, el nombre de tu ser amado otras 5 veces, cruzando en forma de cruz.
Dobla el papel hacia ti tres veces y colócalo dentro del frasco, y Añade:
Miel. (y con intención, di: “Así como esta miel endulza, así se endulza tu alma hacia mí, (y dices su nombre nuevamente).
vierte dentro Canela y azúcar morena, mas o menos dos cucharadas.
Las fotos, si las tienes.
Las cinco monedas, Cierra el frasco y pásale miel por la tapa.
Colócalo frente a las velas.
🕯️y pasamos al Encendido de las velas y la oración:
Enciende primero la vela blanca, (la cual traerá claridad y bendición).
Luego la amarilla, invocando a Oshún.
y recita con fervor y los ojos cerrados:
“Oshún, madre dulce, madre poderosa,
tú que hablas con el río y gobiernas el amor,
haz que (nombre de la persona) sienta el llamado de mi alma,
que su corazón no tenga descanso hasta encontrarme,
que su mente recuerde lo vivido, lo sentido, lo amado.
Si hay orgullo, que se disuelva; si hay dudas, que se aclaren.
Que sus pasos lo traigan a mí guiado por tu luz.
Trae de vuelta el amor, Oshún,
si está escrito en el camino del destino.
Que así sea, así se cumpla.
¡Omolú Oshún!”
🔁 Después, Deja consumir las velas por completo.
Conserva el frasco en un lugar seguro y secreto (puede ser debajo de la cama o en tu altar).
Ofrécele a la orisha cada viernes o sábado un poco de miel, flores o canela, y repite la oración durante 5 o 7 días.
y ten en cuenta siempre esta conclusión que es muy importante:
Cuando invocamos a Oshún para que el amor regrese, no solo le pedimos al universo que se reabra un camino; también estamos revelando nuestras propias emociones sin máscaras.
Y Oshún escucha… pero también enseña.
Ella enseña que el amor verdadero no se mendiga, se honra. Que el apego disfrazado de amor puede convertirse en cadena, y que el deseo sin reciprocidad puede vaciarnos más que llenarnos.
Si ese ser amado ha de volver, volverá tocado por la gracia de Oshún. Pero si su regreso no forma parte de tu destino, la misma orisha te dará el consuelo necesario para soltarlo con dignidad.
Nunca te humilles por amor. Oshún es reina, no esclava del sentimiento. Tú también eres digno de amor recíproco.
Ofrecete miel a ti mismo. Date dulzura propia antes de buscarla afuera, y Camina cuando puedas junto al río, Allí escucharás respuestas. Oshún te hablará siempre en el fluir del agua.
Escucha tus sueños. Ella se manifiesta en símbolos, plumas amarillas, mariposas doradas y perfumes dulces, y Agradece incluso si el amor no regresa. Porque aprendiste, porque diste desde el alma, y porque ahora sabes cuánto puedes amar.
El verdadero poder de este ritual no radica en obligar a alguien a regresar. Radica en que si regresa, lo hará por amor; y si no regresa, tú ya habrás regresado a ti con el amor que te mereces.
maferefun ochún.
No hay comentarios:
Publicar un comentario